|
Galería de fotos
martes, 15 de diciembre de 2020
Ven Santo Espíritu Veni Creator
SALVE REGINA
Salve, Regina, Mater misericordiae,
vita dulcedo, et spes nostra, salve.
Ad te clamamus, exsules filii Hevae,
ad te suspiramus, gementes et flentes,
in hac lacrimarum valle.
Eia, ergo, advocata nostra,
illos tuos misericordes oculos ad nos converte;
et Iesum, benedictum fructum ventris tui,
nobis post hoc exilium ostende.
O clemens, O pia, O dulcis Virgo Maria.
Amen.
REGINA COELI
|
|
lunes, 14 de diciembre de 2020
Apostolado de la Oración
2025
Diciembre:
Por los cristianos en contextos de conflicto.
Oremos para que los cristianos que viven en contextos de guerra o conflicto, especialmente en Medio Oriente, sean semillas de paz, reconciliación y esperanza.
C.E.E. Por la concordia entre los hombres de todas las naciones, para que la celebración del nacimiento del Hijo de Dios impulse a los fieles cristianos a trabajar por instaurar en el mundo la paz que Cristo trajo con su venida.
2026
ENERO
Por la oración con la
Palabra de Dios.
Oremos para que la
oración con la Palabra de Dios sea alimento en nuestras vidas y fuente de
esperanza en nuestras comunidades, ayudándonos a construir una Iglesia más
fraterna y misionera.
C.E.E. Por la unidad de los cristianos y el impulso del
ecumenismo en nuestras diócesis, para que caminemos juntos hacia la plena
comunión, fortaleciendo el diálogo y la colaboración mutua.
FEBRERO
Por los niños con enfermedades incurables.
Oremos para que los niños que padecen enfermedades
incurables y sus familias reciban la atención médica y el apoyo necesario, sin
perder nunca la fuerza y la esperanza.
C.E.E. Por la acogida y acompañamiento de las personas sin
hogar y en situaciones de exclusión social, para que encuentren en nuestras
comunidades un hogar y un signo vivo del amor de Cristo.
MARZO
Por el desarme y la paz.
Oremos para que las Naciones procedan a un desarme efectivo,
particularmente el desarme nuclear, y los líderes mundiales elijan el camino
del diálogo y de la diplomacia en vez de la violencia.
C.E.E. Por los niños,
jóvenes y adultos que están completando su Iniciación Cristiana, para que,
dóciles al Espíritu Santo, encuentren su vocación y lleguen a ser miembros
vivos de la Iglesia.
ABRIL
Por los sacerdotes en crisis.
Oremos por los sacerdotes que atraviesan momentos de crisis
en su vocación, para que encuentren el acompañamiento necesario y que las
comunidades los apoyen con comprensión y oración.
C.E.E. Por los enfermos y los que los cuidan, para que en la
fragilidad de la enfermedad puedan descubrir la cercanía y ternura de Dios y la
solidaridad de la Iglesia.
MAYO
Por una alimentación para todos.
Oremos para que cada uno, desde los grandes productores
hasta los pequeños consumidores, se comprometa para evitar el desperdicio de
alimentos y que todos tengan acceso a una alimentación de calidad.
C.E.E. Por las madres, especialmente las que afrontan la
maternidad en situaciones difíciles, para que encuentren apoyo, respeto y
acogida en la comunidad cristiana y en la sociedad.
JUNIO
Por los valores del deporte.
Oremos para que el deporte sea un instrumento de paz,
encuentro y diálogo entre culturas y naciones y para que promueva valores como
el respeto, la solidaridad y la superación personal.
C.E.E. Por los laicos comprometidos en la acción social y
caritativa, para que sean instrumentos de justicia, paz y fraternidad en favor
de quienes viven en situaciones de sufrimiento y de dificultad.
JULIO
Por el respeto de la vida humana.
Oremos por el respeto y la protección de la vida humana en
todas sus etapas, reconociéndola como un don de Dios.
C.E.E. Por los trabajadores del campo y del mar, para que se
reconozca y valore su dignidad y esfuerzo, y sean apoyados en sus necesidades
materiales y espirituales.
AGOSTO
Por la evangelización en la ciudad.
Oremos para que, en las grandes ciudades, a menudo marcadas
por el anonimato y la soledad, encontremos nuevas formas de anunciar el
Evangelio, descubriendo caminos creativos para construir comunidad.
C.E.E. Por las familias, para que en este tiempo de descanso
refuercen los lazos entre sus miembros y generen espacios de encuentro y
comunión.
SEPTIEMBRE
Por el cuidado del agua.
Oremos por una gestión justa y
sostenible del agua, recurso vital, para que todos tengan acceso equitativo a
ella.
C.E.E. Por los catequistas y los educadores cristianos, para
que, viviendo su vocación como un servicio, transmitan la fe y la esperanza en
las comunidades cristianas con fidelidad y creatividad.
OCTUBRE
Por la pastoral de la
salud mental.
Recemos para que la pastoral de la salud mental se integre
en toda la Iglesia, ayudando a superar el estigma y la discriminación hacia las
personas con enfermedades mentales.
C.E.E. Por los misioneros y misioneras, para que su entrega
generosa al anuncio del Evangelio sea sostenida por la oración y el compromiso
solidario de toda la Iglesia.
NOVIEMBRE
Por el buen uso de la riqueza.
Oremos por un buen uso de la riqueza para que, no cediendo a
la tentación del egoísmo, esté siempre al servicio del bien común y la
solidaridad con los que tienen menos.
C.E.E. Por los ancianos y las personas mayores, para que
reciban el reconocimiento y el cuidado que merecen, y sigan siendo testigos de
fe y de sabiduría en nuestras familias y comunidades.
DICIEMBRE
Por las familias monoparentales
Oremos por las
familias que experimentan la ausencia de una madre o de un padre, para que
encuentren en la Iglesia apoyo y acompañamiento, y en la Fe ayuda y fuerza en
los momentos difíciles.
C.E.E. Por los que viven la Navidad en soledad o sin
recursos, para que la luz del nacimiento de Cristo les brinde esperanza,
consuelo y fraternidad.
Ángelus
Ángelus
El Ángel del Señor anunció a María,
Y concibió por obra del Espíritu Santo.
Ave María.
He aquí la esclava del Señor.
Hágase en mi según tu palabra.
Ave María.
Y el Verbo se hizo carne.
Y acampó entre nosotros.
Ave María.
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios,
Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén
Oración
Te suplicamos, Señor, que derrames tu gracia en nuestras almas para que los que, por el anuncio del Ángel, hemos conocido la encarnación de tu Hijo Jesucristo, por su Pasión y Cruz seamos llevados a la gloria de su Resurrección. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor.
Amén.Gloria... Gloria... Gloria...



